Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando las entradas de diciembre, 2023

Ojalá estuvieras aquí.

Como desearía que estuvieras aquí, que te hubieras quedado una noche más para poder tenerte una mañana más. He estado pensando en ti, como una tarea obligatoria, pero es fácil, no es complicado pensar en ti como el amor de mi vida, el papel te queda y yo simplemente soy un admirador de tu forma de interpretarlo conmigo. Sé que ha pasado tiempo, y ya no nos sabemos, ahora somos unos desconocidos, pero te aseguro, que lo que llevo en mí no se va, solo se calla, está guardado ahí, tal vez algún día te aparezcas de la nada, me abraces y rompamos esas líneas que nosotros mismos nos pusimos.  ¿Por qué la vida te pone al amor de tu vida tan solo 1unos cuantos atardeceres y luego te aleja de ella?  Fue tan fácil amarte, quererte, enamorarme de ti que no necesité clases previas, todo lo aprendí contigo paso a paso, amar, sufrir, conocí el mundo y el mundo me conoció por fin enamorado. Me conocí yo como hombre ante una mujer, una mujer única como tú, como ninguna, como solo tú podías se...

Glorias de un pasado tan pasado.

Perdí la cuenta de los días que te esperé, y al final, sin querer, creo que un día simplemente dejó de importar. Sonaba el teléfono y ya no pensaba que eras tú, llegaba a casa y ya no imaginaba que estarías ahí, despertaba y ya no eras lo primero, escuchaba tu nombre y ya no sentía un rayo partiéndome en dos. Te dejé de esperar, y empezaron a pasarme cosas, conocí personas, regresé a hacer lo que me gusta, me puse un poquito en forma, empecé a emocionarme otra vez por el mañana y la sonrisa un día también regresó. No te olvidé, te lo prometo, un amor como este se recuerda toda la vida, así que sólo te guardé en un lugar donde el futuro no chocara contigo, y me costó bastante, no fue fácil convencer al destino de que ya eras pasado. Dejé de esperarte, dejé de soñarte y quizá también dejé de quererte, no supe cuándo para ser sincero, sólo sé que el corazón se cansó de esperar el verano de un año que ya había pasado.  "se me acabó el carisma  si me vieras,  mi voz ya no es l...

¡Feliz cumpleaños Jesús!

Eres el ser más extraordinario y majestuoso, y aunque eres eterno, se nos ocurrió conmemorar tu nacimiento en la Tierra desde hace unos dos mil veintitantos años y, esta Nochebuena vale la pena reiterarlo... eres el ser más extraordinario y majestuoso del universo, y yo tan ordinario, imperfecto y pecador, sigo disfrutando del regalo de tu existencia en mi vida porque tú eres el ser más extraordinario y majestuoso de mi historia.  Gracias Jesús, por amarnos. Por venir a salvarnos. Eres el más hermoso de los hijos de los hombres. 

Los mejores se equivocan... una y otra vez.

Aceptar los errores cometidos en mi pasado era el primer paso para cambiar. Fallé, no una ni dos veces, fueron varias, tanto a mí mismo y a los demás. Cometí errores, tomé actitudes que no eran las correctas. Había cosas negativas en mí que un día decidí y juré que nunca más las volvería a cometer, fue en aquellas noches donde dolía y nadie me reconfortaba que decidi que cambiaría. He crecido, madurado y entendido sobre todo aquello que hice mal, pero ahí radica mi aprendizaje, el no volver a cometer los mismos errores, hoy entiendo la vida de otra manera, hoy valoro lo que mucho tiempo sentí seguro y hoy ya no está. Hoy soy otra persona, no perfecto pero intento día a día cambiar, mejorar, corregir y aceptar. Fue difícil, ojalá lo hubiera entendido en su momento. Pero nunca es tarde para ser un mejor yo, para mí, y para aquellos que durante mi vida, han sido importantes y lo seguirán siendo, hoy aquí estoy, intentando ser un mejor yo y lo estoy consiguiendo. 

Dame tu mano.

Dame tu mano, quiero enseñarte hoy con la sinceridad que me pide el alma y el amor que lleva mi corazón para ti. Decirte que no hay más, no hay ya nada más allá de ti, no existe el universo ni la vida misma sin ti, he conocido cada detalle y tu forma de amar en este tiempo que ya no tengo duda que eres un ser especial, que eres a quien quiero amar cada mañana, porque ya no quiero días vacíos ni grises, quiero una eternidad contigo, porque hablar de eternidades se hacen segundos cuando te tengo aquí, en este pecho que te abraza como lo más preciado que puede sentir. Te encontré y no quiero perderte, ayer tenía miedo de no encontrarte, hoy me aterra pensarme en algún futuro sin ti, no importa cual, pero sin ti no lo quiero. Quiero quererte sin límites, sin días ni tiempos, sin restricciones de nada, tal vez no lo has entendido, pero eres mi centro, mi lugar seguro, mi fuerza y mi mayor debilidad a la par. Mi fe está puesta en ti, en este punto y en esta noche especial. No te vayas nunca,...

Un texto más sin ti.

Puedo escribir tantas cosas esta noche, puedo describir tan a detalle en palabras cada sentimiento que llevo que me da algo de miedo hacerlo. Es una noche difícil, ya son varias seguidas. Pero aquí sigo, solo que hoy he pensado en ti, ya sabes, cuando se trata de escribir, eres la primera opción, la primera imagen y la mejor forma de desahogarme. No es que quiera, es que no puedo evitarlo. No me molesta, pero que no estés aquí es como un acto de tortura, escribirte, sabiendo que no me lees, quererte sabiendo que no me quieres, esperarte sabiendo que no vas a volver. Ese es el punto y el puto problema de esto. Hacer todo sin ti, deseando todo de ti y tú sin ganas de darme nada. Sigo presente, sigo vivo, algo así como tu recuerdo, como tu ausencia y los buenos momentos. Deberías de estar aquí, pero no estás, debería de olvidarte, pero no te olvido, aunque debería...  La gente me lo dice seguido, pero que saben ellos que no sepa yo de ti, que sabes tú que no sepan ellos. Es la forma e...

Catorce lunas llenas.

No sé por qué te sigo pensando tanto, a veces me pregunto si todavía habrá un poquito de mí en tus días, si de vez en cuando algún atardecer te recuerda mi sonrisa, si aún escuchas alguna de nuestras canciones o si tú si pudiste meterme en el pasado y ya no guardas nada de lo que fuimos. Intenté odiarte pero no pude, creo que no se puede odiar lo que amaste con todo el corazón, y yo sé que ya es tarde para los mensajes, para otro intento o para volver a confiar, pero sigo pensando en los besos que me debes, en que un día volverás a dormir en mi pecho y realmente no tengo ni una puta idea si volveré a verte, si volveré a escucharte o si volveré a besarte. El otro día vi un montón de estrelas y crucé los dedos para que fuera una señal, no sé si mi chica ya es de otra galaxia, si tú también tienes la mala costumbre de llevar la cuenta o no, pero yo sí, ya van cuatrocientos nueve días, catorce lunas llenas, ciento dieciocho poemas y contando.

De vez en cuando.

Me gusta recordarte de vez en cuando, porque realmente fuiste algo lindo en mi vida, tal vez no fuiste mi primer amor, tal vez no duramos tanto como hubiéramos querido, pero éramos nuestro lugar seguro, estábamos locos de amor el uno por el otro y con eso bastaba. Ya no le reclamo al destino por nosotros, porque me gusta pensarte con una sonrisa, me gusta imaginar que eres feliz, que quizá ya pasaste la página, que escribes nuevas historias y que al igual que yo, de vez en cuando nos extrañamos, pero aún así nos deseamos lo mejor. Por eso me gusta pensarte uno que otro día, creo que fuimos algo demasiado lindo como para querer hacer que nunca coincidimos, y aunque hay momentos donde realmente quisiera volver a abrazarte, escuchar tu voz o ver tus ojos en la pantalla, sé que estás bien y que quizá así me recuerdas tú también.

No era parte del plan continuar.

Sabía que tu adiós me iba a doler de muchas formas. No necesitaba que te fueras para entenderlo. Ya me dolía el pecho con el solo hecho de pensarlo en mis silencios o teniéndote en mis brazos.  Sabía que irte o irme, sería un buen golpe al corazón, aún entendiendo que así era mejor para ti, para mí o para ambos. Nada podía quitar ese sentimiento de perder lo que más quieres. Sabía que extrañaría cada parte de ti y que cada día me harías falta un poquito más. No sé, son de esas cosas que no logras comprender cómo es que lo sientes y al final sucede tal cual.  El proceso de esta vida sin ti siguió; así tenía que ser. Solo que no imaginaba que cuando algo me saliera bien, cuando la vida me diera algún regalo, todo lo iba a querer compartir contigo. O cuando algo saliera mal, cuando los problemas, las situaciones difíciles de mi vida me consumieran y no tuviera a donde ir, pensaría en ti y en tu abrazo. Ese que me tranquilizara el alma una vez más. Pensarte y necesitarte en lo bue...

El último amor que tengas.

Yo no pido mucho, solamente déjame ser tu mensajito de buenos días todos los días, mandarte un poema o una canción de vez en cuando y que sonrías, si te gustan las rosas, los vinos en casa, las películas, el compromiso y los huevos rancheros, y darte muchas flores, que yo te presumo desde el primer segundo o hasta que estemos afuera de la iglesia para más seguro, si quieres vamos lento o nos volvemos locos sin pensarle tanto, tenemos un par de perritas, o varios gatos o medio árbol de navidad y nos vamos a vivir juntitos, navidad con tu familia y año nuevo con la mía, trabajamos, viajamos y cumplimos nuestros sueños agarrados de la mano. Yo no pido mucho, nada más quiero ser el último amor que tengas, el amor de tu vida o como quieras llamarme.