Yo sigo creyendo que un día estaré con esa persona que me va a sentir que el amor es algo sencillo, que sólo tendrá ojos para mí desde el primer segundo, que se va a esforzar por demostrarme todos los putos días, que va a enamorarme sin falta a media tarde con una canción, con un poema o con un beso en la frente. Y me va a dedicar su tiempo y sus sonrisas, iremos juntos a mis lugares favoritos y también a ver atardeceres y estrellas, nos pondremos a hacer planes tontos y serios a futuro, nos vamos a elegir cada mañana y nos haremos sentir siempre a salvo, siempre seguros, siempre en el lugar correcto. Yo sigo creyendo que un día estaré con esa persona, a pesar de que no he tenido tan buena suerte, a pesar de las veces que me han quebrado el corazón, a pesar de esos intentos que no duraron lo que prometían, yo sigo creyendo que mi para siempre ya no tarda en llegar. Ojalá que mi próximo amor sea como ese viaje en carretera con buena musiquita y vista al mar.
Hace ya algún tiempo que decidí estar solo, dejarme ya de tantas pendejadas y quitarme el miedo a la soledad, porque pues, en realidad no pasa nada si nadie llama o escribe, no pasa nada si tengo que esperar a que un buen amor llegue, no pasa nada si dedico el tiempo para mí. A veces pienso que le damos demasiada importancia al amor, o sea, sí está bien tener pareja, pero tampoco es lo único en la vida que vale la pena, y no me mal entiendas, soy un romántico de lo peor, pero ya me cansé de serlo con la persona equivocada. Y en este tiempo de soledad he aprendido que siempre habrá opciones, pero debemos tener el maldito de valor de decir que no a alguien que no llena nuestras expectativas, tener el valor de no conformarnos, tener el valor de no aceptar algo sólo porque nos gusta, o nos habla bonito, o cualquier otra borona de amor entre sus líneas. La mayoría de las personas complican el amor porque en realidad aceptaron algo que no les gustaba desde el inicio, algo que les daba dudas ...
Comentarios
Publicar un comentario