Espero curarme de ti
y que las lluvias ya no duelan
sino que me acaricien los miedos
que los inviernos no sean nostálgicos
sino una excusa para cruzar nuestras piernas.
Espero curarme de ti
y que las canciones ya no suspiren tu nombre sino que te traigan a mí
que bailemos al ritmo de tus caderas
y que pongamos como excusa
la música para los besos.
Espero curarme de ti
y que los insomnios
ya no sean un montón de desvelos en vano
sino un motivo más
para desbordarnos las ganas de tocarnos
que tus manos se marquen en mi espalda
y que cada noche tus hombros
juegen a ser cueva de mis labios.
Espero curarme de ti
y sanar esta ausencia que adopté
el día que te marchaste,
quise ponerle nombre a todos los poemas que rimaban con tu nombre
te busqué hasta en las sábanas
para ver si encontraba tu aroma
perdido en una almohada.
Pero no estabas.
Me dejaste aquí
como se abandonan a los amantes modernos con un montón de preguntas sin contestar
con miles de mensajes de voz
con cientos de canciones para llorar
o para esperar a tu regreso.
Espero curarme de ti
y que las penas se ahoguen
en un mar de caricias
porque tarde o temprano
aprenderán a nadar en estas lagunas de alcohol
que se agrandan en el dolor
de pronunciar tu nombre.
Espero curarme de ti
y dejar de morderme los labios
cada vez que recuerdo los tuyos.
Comentarios
Publicar un comentario