No sé cómo despedirme de ti.
Pensé que funcionaríamos, que seríamos esos tercos que lo intentarían un millón de veces hasta que nos saliera, pero supongo que perdimos la cuenta.
He estado sentada aquí buscando las palabras para poder decirte adiós, y lo único que me sale es que yo jamás amé a nadie como ahora Te Amo a ti, y no supe que hacer con eso, porque nunca pensé que podía tenerlo o quedármelo, y nunca voy a entenderlo, ¿cómo donde hubo tanto amor, ahora solo hay silencio?, supongo que como todo, nada es para siempre.
Ya no voy a molestarte ni a insistir más, porque entiendo perfectamente lo que sucedió en esta relación, te llené de tantas peticiones, de tanto amor que es evidente no se podía porque ambos queremos cosas distintas, fui bastante intensa, pero sabes? A mi favor puedo decir que pensé que eso te gustaba de mi, es decir, que no me rendí, que fui terca, pero también es agotador, y así como tú te cansaste me pasó igual.
Ya no hubo "buenos días" por las mañanas, ya no supe cómo te fue en el día, ya no me sentí parte de tu vida, se acabaron los “también te amo mucho mi amor” y las llamadas por las noches. Te extrañé mucho todas estas noches, y te extrañaré todas las siguientes, porque claramente no podré borrarte de mi vida así como así, pero cuando piense en ti, pensaré en todo lo bueno que nos sucedió, y aunque no lo creas, sanaste parte de mi corazón.
Discúlpame por querer contigo lo que no quise con nadie más, por correr cuando nos tocaba caminar.
En verdad, muchas gracias.
Comentarios
Publicar un comentario