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No llegues tarde.

Te hubiese esperado.

Lo juro, tenía ese brillo en mis ojos, 
esa sonrisa al escuchar tu nombre 
salir de cada latido.
No me importaba la distancia, 
ni el poco tiempo
podía atravesar el país
por verte tan sólo 5 minutos
Te hubiese hablado, después de tanto tiempo
lo hubiese hecho.

Si al menos tú, lo hubieses hecho,
si hubieras sido más valiente 
y yo menos torpe,
el desinterés es doloroso
el reloj no se detiene y la vida sigue, 
con o sin amor, la vida sigue.

Quizá el amor sea seguir escribiéndote
poemas en todos mis momentos malos
todas mis madrugadas. 
No voy a mentirte: 
te echo tanto de menos que hay días que
tengo miedo de pronunciarlo 
en voz alta y que dentro de mí 
no pare de llover.

Te espero en el sueño de siempre.
No llegues tarde.

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