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No es una costumbre.

Decir "te amo" no es una costumbre. Amarte es preguntar si ya comiste o tienes frío. Amarte es pensar en ti cuando me gusta algo de esa tienda. Amarte es imaginar que caminas a mi lado todo el tiempo. Amarte es hablar contigo aunque no me escuches. Amarte es respetar tu ausencia. Amarte es cuidar tus emociones,  aunque no sean mi responsabilidad. Amarte es saber que llegaste bien a casa. Amarte es saber que eres libre. Amarte es guardarte un espacio en mi almohada. Amarte es tener una copa de vino siempre para ti. Amarte es sonreír cada vez que le hablo a otros de ti. Amarte es saber que quiero vivir por ti. Amarte es ser feliz cuando tú eres feliz. Amarte es saber guardar silencio cuando lo necesitas. Amarte es dedicar más noches a mirar el cielo juntos. Amarte es usar la cama también para beber vino y charlar de mil cosas. Amarte es enamorarme de tu cabello enredado. Amarte es mucho más que decir  "te amo". Decir "te amo" es muy fácil, pero saber que Te ...

Inquebrantable.

Te haré de acero hasta volverte inquebrantable; voy a extraer de tus entrañas los amores caducados y los nombres que tatué por creerme enamorado. Te haré de acero hasta volverte invulnerable; voy a depurar de cada fibra,  lo que te hace daño. Te haré fuerte, tanto que... si por accidente mis labios la pronuncian, tú no corras presuroso y mi calma sea inalterable. Te he de armar de valor sin necesidad de embriagarme, ni recurrir a fugarme en otros brazos; te haré de acero, corazón, con el fuego de mi alma y sin tener que reiniciarte.

Por si regresa.

Olor a nicotina, mesas cojas Comandas de tequila, luces rojas Tertulias que se olvidan cuando llega la maldita resaca Meseras con billetes en la blusa Trincheras de una luz semi difusa Que les quita la cara a los que esconden  secretos personales.  El bar es un hotel medio pelo  que le cura el desconsuelo  a los que no saben que hacer con el desvelo,  como yo Papeles por debajo de la mesa Cocteles que te alivian la tristeza Canciones como dagas en el pecho de la melancolía Historias que no van a ningún lado Glorias de un pasado tan pasado Y mis sueños merodeando suicidados en la vieja tarima Yo llevo aquí metido media vida Y sigo solo y sin salida Y recordando todas las putas noches.  Que ahí se sentaba ella Que ahí se enamoro de mí Ahí mientras cantaba Pintaba en servilletas mensajes subversivos Mientras se las sujetaba Ahí en esa silla ella Un día se aburrió, de mí.  Dolores se llamaba que ironía Dolores no buscaba compañía Que le durara mas que el a...

Cuando la vida te sacude.

Vas caminando con tu taza de café y de repente alguien pasa, te empuja y hace que se te derrame el café por todas partes. -¿Por qué se te derramó el café?  -Porque alguien me empujó. Respuesta equivocada: Derramaste el café porque tenías café en la taza. Si hubiera sido té, hubieras derramado el té.  Lo que tengas en la taza, es lo que se va a derramar. Por lo tanto, cuando la vida te sacude (que seguro pasará) lo que sea que tengas dentro de ti, vas a derramar. Puedes ir por la vida fingiendo que tu taza está llena de virtudes, pero cuando la vida te empuje vas a derramar lo que en realidad tengas en tu interior. Eventualmente sale la verdad a la luz. Así que habrá que preguntarse a uno mismo. ¿Qué hay en mi taza? Cuando la vida se ponga difícil, ¿qué voy a derramar? ¿Alegría, agradecimiento, paz, humildad? ¿O coraje, amargura, palabras o reacciones duras? ¡Tú eliges! Ahora, trabaja en llenar tu taza con gratitud, perdón, alegria, palabras positivas y amables, generosidad y a...

Es tan tarde ya.

¿Y para qué?  Después de que te vas, volvés Y está otra vez ¿Todo de vuelta?: Tostar el pan Y ese ademán al despertar Sin más que hablar, Sin nada cierto. Y entonces quién Recuerda bien como eras vos Antes de vos, ¿Cuando querías? ¿Cómo era yo? ¿Cómo era el mundo en tu rincón? ¿Cómo era el corazón? ¿Dónde latía? ¿Cómo? ¿Es tan tarde ya? ¿Tanto estuve cantando? Tomate otro café, vení Que afuera está nevando. Y así te vi Perder aquí todo el verdor Y aquel calor Que te amparaba. Quedarte al pie De alguna vieja tradición De indecisión, De "dale tiempo" Y nada más Nos queda ya que la impresión De una pasión Vuelta ceniza. Y aún así Yo sigo aquí: podría ser (Sólo podría ser) Que se encendiera. ¿Cómo? ¿Es tan tarde ya? Malpaís.

Cuestión de elección.

Sé que te quiero,  porque me quiero contigo  sin descanso los fines de semana,  ni interrupciones del reloj.  Sé que te quiero,  porque la poesía toma sentido  si la leo contigo en mi cabeza,  o si me la lees tú,  conmigo recostado en tu regazo.  Y no hay nada tan bonito,  como saber que tú me quieres  de la misma manera,  y con la misma intensidad.  Quererte ha sido fácil,  y aunque a veces la vida  se torne difícil,  quiero construirte un par de sueños  para que los vivas conmigo.  Te invito a un café,  para que te quedes  por lo menos esta noche,  te escribiré algunos versos,  quizá corro con la suerte  de que mientras lees uno de ellos,  quieras quedarte para siempre.  Yo no elegí perderme en tu mirada,  pero si elegí no encontrarme en otra. 

Enojada y testaruda.

Hay tantas cosas bellas en este mundo,  pero ella no entra en ese grupo de cosas bellas, porque ella supera el concepto de belleza,  ha dejado por los suelos  todas aquellas palabras que han  intentado definirla como alguien bella.  Ella me gusta así, con esa cara de enojada, que se entrega cuando quiere no cuando puede, que cuando tiene ganas de hablar nadie la calla, pero que cuando calla nadie la hace hablar; me gusta con sus ojeras y sus labios y, seré sincero, ya no sé si la rara es ella o si el raro soy yo por quererla así, tal cual es, tan enojada y testaruda,  quizá eso cambia  cuando se deshace entre mis brazos,  ella tan solo me llena  de risas y sonrisas.  Dime que me quieres y que no lo dudas, que quererme es lo mejor que saber hacer, y ayúdame a creerte. Que me quieres, aunque mañana me vuelva lluvia y que serás abrigo. Que nos a vamos a querer siempre y que no importa que la vida te apague me apague nos apague. ...